Phileas Fogg llega por fin a Hong-Kong (China) y allí el inspector Fix consigue que nuestro viajero pierda el barco que le lleve a Yokohama (Japón), retiene a Rigodón para evitar que éste le avise de la salida del Carnatic (barco que deberían tomar).
Cuando el Sr. Fogg se entera, como siempre, no se preocupa y busca algún otro barco en que puedan hacer la travesía, es así como embarcan en la goleta Tankadere, que les permitirá coger el vapor rumbo a San Francisco…, ¡por los pelos!.
Para conocer un poco mejor este país, Mario nos trae un libro con muchas curiosidades sobre China.
Descubrimos la Gran Muralla China, sabemos que es una de las siete maravillas del mundo (recordad que el Taj Mahal también). ¡Fijaos qué impresionante! ¡Es larguísima!
También descubrimos que los números y las letras no son como los nuestros ¡mirad qué diferentes!
A Mario le gusta especialmente una página en la que habla de lo bien que se le da a los chinos hacer cosas recortando papel.
Montse nos propone hacer farolillos rojos y, ¡claro!, rápidamente nos animamos, con el libro descubrimos que a los pequeños los llaman "culito de bebé" y a los medianos "luz de tomate" (les hacen mucha gracia los nombres).
¡Así de contentos se van a casa con sus farolillos!
Hemos añadido un juego más a nuestro rincón de puzzles, es de origen chino y se llama tangram. Se compone de siete piezas con las que se pueden hacer muchísimas figuras.
Como es difícil, nosotros intentaremos primero llegar a ellas a través de las soluciones.
Disfrutad mucho con este pequeño paseo.
Por cierto, espero que os hayan traído muchas cosas los Reyes.
Un abrazo
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