Sigue el viaje de nuestros amigos y, cuando Phileas Fogg llega a Yokohama (Japón), descubre que Rigodón había llegado un día antes y se va en su busca. Rigodón, como no tenía dinero, tuvo que vender su ropa, comprarse una túnica japonesa y pedir trabajo con un grupo de acróbatas japoneses. Era el encargado de sostener una pirámide humana; el día del estreno, la pirámide se derrumba porque Rigodón se levantó al ver entre el público al señor Fogg, que por fin lo había encontrado.
En Japón hay muchas cosas que nos llaman la atención, es una cultura muy distinta a la nuestra, empezando por el idioma, que no se parece nada de nada al que nosotros hablamos, ni en la pronunciación ni en la escritura.
Aquí os dejo este simpático vídeo con el que conoceréis los números del 1 al 10 en japonés.
¡Fijaos lo distintos que suenan a nuestros números!
Y con esta canción los saludos y formas de cortesía más comunes, a ver si os quedáis con alguno.
¿Qué difícil, verdad?
¿Qué difícil, verdad?
De Japón proviene una técnica con la que conseguir árboles en miniatura, a estos árboles se les llama bonsais. Aquí debajo podéis ver un bonsai de enebro y otro de cerezo.
El árbol de Japón tiene una antigua leyenda, la leyenda de Sakura. Con esta leyenda descubrimos qué es muy importante la floración del cerezo en este país y por qué se llama Sakura a este momento.
Otra preciosa leyenda japonesa, en esta ocasión con el espejo como protagonista.
El origami es el arte de doblar papel. Aquí nos cuentan más sobre esta técnica japonesa.
Y con este vídeo podéis aprender a hacer un comecomos.
He podido recuperar alguna foto de aquel momento:
Un abrazo enorme
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